jueves, 24 de agosto de 2017

LAS CARTAS DE TINY " DOS ESTRELLAS Y ALGUNAS HOJAS"

..."las ramas han crecido mas de lo esperado. Se ven un poco desprolijas y entrecruzadas. No sé si el año pasado estaban igual que ahora. Las miro detenidamente y veo que ya casi están venciendo el alambre que puse sobre los troncos, para simular un techo. Es claro que cuando las flores y las hojas lo cubren, el techo parece natural ,pero ahora que solo están las ramas, esto no se ve muy bien. Ya se que no podes verlo y es por eso que te lo cuento. Mi carta tendría que ir acompañada de una foto para que las palabras no fueran tan imprescindibles, pero la máquina que tanto usamos ya no funciona. Creo que todavía tiene el rollo del último viaje ¿ se vencen las fotos ? mejor voy a seguir contándote porque nada va a ser mas instantáneo que este momento en el que miro y luego te escribo. A veces, como ahora, siento que son tantas las cosas que tengo para contarte que me quedo mirando un buen rato al cielo y dejo de escribir. Porque no solo es aquello que te escribo; el problema es mucho mas grande, tiene una estrecha relación con lo que pienso(eso también cuenta a la hora de escribirte)y a veces las hojas dejan de ser dos y se vuelven numerosas y recién ahí digo en voz alta: esto ya es suficiente. Al rato me olvido de las extensiones y retomo las ideas, ya sin necesidad de anotarlas. La vida, día tras día se va encargando de darme nuevas tardes y allí siempre encuentro diferentes situaciones para pensar. El pensamiento me distrae de lo cotidiano pero no hay una sola noche en la que deje mi rutina y no busque dos estrellas para pedir los tres deseos, sin hablar. Me sigue costando mantenerme en silencio hasta que los pido y cuando encuentro la segunda estrella, ya estoy en un estado calamitoso y solo quiero volver a hablar. Ya sabés que nunca voy a dejar esa costumbre. Es tradición familiar, tanto como escribir, así que sabrás comprender porqué a veces estoy en silencio"

Pd: Es una noche nublada y no logro encontrar la segunda estrella. Cuando amanezca, seguiré escribiendo.

Cariños Tiny

jueves, 17 de agosto de 2017

LAS CARTAS DE TINY- "HAY MÚSICA EN LA CASA"

..."debe ser la hora o tal vez el día. No se bien qué es lo que está pasando en la casa hoy. Las persianas están levantadas desde temprano, pero las ventanas están cerradas. Hay sol pero el invierno todavía sigue y el sol refleja mejor en el vidrio que en la cara. No te olvides que si quiero estar al sol solo tengo que abrir la puerta y mirarlo. Asi y todo, la música se escucha muy fuerte y no se de dónde viene. Vecinos no tengo y los autos que pasan por la calle de tierra, lo hacen los feriados y de vez en cuando. Es tan linda la música que pensé que había dejado grabada esa canción en el equipo de música del living. Sí. Todavía funciona. Ya sabés que con los años algunas cosas mejoran y mi equipo cada vez tiene mejor sonido. Como te decía, fui hasta allá para ver si era eso, pero no. La música no viene de ese lugar. Está en toda la casa. Recorrí los rincones, esos que yo te decía que tienen buena acústica. Los que amplificaban mi voz cuando estaba enojada. Sí. Esos. Pensé en que tal vez  la música podría venir del altillo y acá estoy, sentada en la silla hamaca, balanceándome entre los recuerdos y la voz que sigue sonando ¿ será la memoria que tiene sonido? ¿ habré dejado en algún rincón del pasado guardada esa canción? la letra no es de gran profundidad, pero tiene su encanto. El silbido es de los pájaros. Eso es inconfundible.Voy a dejar de escribirte y voy a cerrar los ojos para contarte luego, cuando deje de escuchar la canción, qué lindo se ha vuelto este día. Podré recordarlo. Lo sé. Estoy pensando que la música puede estar sonando en el subsuelo. Hace mucho tiempo que no abro la compuerta y la madera está un poco hinchada. Si logro abrirla, si puedo bajar...lo que siga de esta carta será desde abajo"

Cariños Tiny.

miércoles, 16 de agosto de 2017

LAS CARTAS DE TINY " LAS HORMIGAS Y LAS CONTRADICCIONES"

..."Si no fuera por la birome que se me resbaló de la mano, estaría contándote otras cosas. Pero la birome se cayó al piso y cuando me agaché para agarrarla, las ví ¡Las hormigas están construyendo un mundo! es imposible dejar de mirarlas. Llevo contadas veinte hojas(algunas mas verdes que otras) y tres ramas chicas. El lugar donde están apilando todo el material, es justo donde empieza la canaleta que se  lleva el agua cuando llueve ¿ te acordás que cuando crecía el pasto ,casi siempre pisaba ahí y me caía? es en ese rincón que está pegado a la canaleta. Justo ahí, será el mundo nuevo. Me acerco solo un poco, porque no quiero interrumpirlas. Estoy asombrada de la perseverancia que tienen. Te digo que desde hace un buen rato estoy mirándolas y parecen no tener apuro. Como si el tiempo no pasara y la ansiedad no existiera. Pienso que la vida está llena de contradicciones. Hace pocos meses yo lidiaba contra el hormiguero que estaba en la cocina y ahora ( si me vieras) estoy vallando la zona de la construcción, con alambre y malla sima. Solo pienso en proteger los sueños de las hormigas y así  cuidarlas del perro y sus manotazos.
Pd: imagino tu risa al leer la carta que te escribo seria"

Cariños, Tiny.

martes, 8 de agosto de 2017

LAS CARTAS DE TINY " LA DESPENSA Y EL CARIÑO"

..."no se cómo logré encontrar unos minutos libres para contarte, habiendo tenido tantas cosas que acomodar en la despensa. Vos tampoco podés haberte olvidado que es en agosto cuando más trabajo tengo en ese lugar¿ Te acordás que lo llamábamos "el tiempo de las hormigas"? días y más días ubicando los bolsones de harinas; tardes enteras cerrando las cajas con las latas de conservas. Así estuve hoy. Puse tres estantes de madera, en la parte del fondo, esa a la que teniamos que entrar agachados, como si fuera un túnel ¿ te acordás? Me pareció bien la idea de los estantes, aunque te confieso que me dí mas de un golpe contra el techo. No entiendo quién tuvo la magnífica idea de construir esta casa tan extraña. Aunque ya empecé a tenerle cariño. Creo que esto último se empieza a sentir con los años; lo del cariño, digo. Uno se llena de recuerdos y cada rincón de la casa parece tener un cartel con letras bien grandes, solo para cumplir con la memoria. Me pasa también con los árboles y alguna que otra planta. Cambian las hojas, nacen flores nuevas...pero la tierra sigue siendo la misma y por lo tanto la memoria está siempre ahí, bajo tierra, pero ahí. La única parte de la casa, que te aseguro no reconocerías, es el altillo. Lo cambié por completo. No solo tiene sus paredes pintadas de azul , sino que contraté a una persona para que hiciera una ventana redonda. Sí. Algo que había visto en una película hace mucho tiempo. Da la sensación de estar en un barco. Puse el cuadro  del muelle, é
se que siempre tenía apoyado en la mesa de la entrada. Si no fuera por la vista, te aseguro que me siento en altamar, cuando estoy sentada al lado de esa ventana. La silla hamaca cumple la función del movimiento de las olas y solo tengo que cerrar los ojos para sentirme naufragando. Algunas tardes son mas tranquilas que otras. Así es el mar y así son los recuerdos. Ahora, en este momento, voy a ir a descansar al altillo. Tengo varias cartas por abrir y si la marea me acompaña, quizá hasta  pueda leerlas"
Cariños, Tiny

lunes, 7 de agosto de 2017

LAS CARTAS DEL BLOG - CARTA 10 "CARTERO, CARTERO"

CARTA 10-"CARTERO, CARTERO"


..." No te creas que me divirtió mucho despertarme a las siete de la mañana, con los gritos que se escuchaban desde afuera. Yo no sabía si estaba soñando o si la voz era real. Tanto insistió el buen hombre que tuve que levantarme y dejar librado al azar el desenlace de ese sueño que parecía tan interesante. No encontré las pantuflas, así que salí descalza con los pelos al viento. Ya sabés que mi peinado nunca es como los de las revistas y a esa hora ni siquiera puede describirse en palabras. El pronóstico de ayer, en el que indicaban vientes fuertes, fue tan cierto como mi imposibilidad de llegar a la tranquera, en un estado decente. Pero llegué y pude abrir el candado y también estirar el brazo para tomar el sobre. Esta vez sí lo saludé y le agradecí la gentileza, por no decir el atrevimiento, de haberse animado a llegar, con la tormenta. Llegué a la galería y me amarré al poste, sin soltar el sobre. Las cartas no deberían llegar en estos días de tanto viento. Luego de leerla voy a abrir una casilla postal y eso será la solución a tantas esperas y desencuentros. Me entretiene la idea de tener una llave con la que pueda abrir las ilusiones y cerrar los dolores. Hoy es un día complicado, no solo para intentar salir entre tanta tierra, sino para disponerme a abrir este sobre. Solo espero no leer palabras repetidas ni frases inconclusas ¿ te conté que el dueño actuál del gato redacta muy mal? Tengo miedo de volver a leer su letra. Ya venceré esos miedos. Pude sortear miedos mucho mas difíciles asi que voy a abrir el sobre. Esperame ahí, tratá de permanecer quieto hasta que la lea y la procese. Las palabras que vienen en una carta necesitan reposar, luego de ser leidas. No es fácil ni la interpretación ni la habilidad para luego poder contarla. Es una carta, sí. No voy a permitir que unas hojas cambien mi mañana, ya bastante tuve con el modo en el que arrancó el día. Primero voy a peinarme y después, si es que hay un después, voy a ver si la leo."
Pd: A la tarde, siempre mejora todo.

Cariños Tiny.

viernes, 4 de agosto de 2017

LAS CARTAS DEL BLOG "EL LICOR Y LA GUITARRA"

CARTA 8-

..."Después de haber leido tres veces la carta que recibí el otro día, la de la ilusión, decidí que voy a dejar de hablarte del gato. No tiene sentido detallarte el sufrimiento y las lágrimas que me caían en cada línea que leía. Ya está. El gato se fue y está en Mendoza, en manos de quién escribió esas líneas tan feas, solo para decirme que estaba encantado con mi gato y que solo me escribía para decirme que estaba bien pero que no tenía intenciones de devolverlo. Sus argumentos parecían bastante lógicos y a esta altura de mi vida, creo que solo quiero que mi gato sea felíz. El día amaneció con mucha neblina y ahora miro por la ventana al sol que brilla como nunca. Tengo nuevas ilusiones y algún que otro proyecto merodeando por la casa. Por las dudas le di dos vueltas a la llave de la puerta principal y cerré la tranca de la puerta del fondo, la que te daba tanto trabajo cerrar. Es que no quiero que esas pocas ilusiones de las que te hablo puedan llegar a irse, como el gato. Las ventanas están abiertas de par en par y sigo sin poner las rejas. Los postigos me dan mas seguridad que los hierros y aunque simulan abrirse en cuestión de segundos, la humedad se ha ido encargando en estos últimos años de volverle la tarea bien complicada a quién intente abrirlos. Soy la dueña, tanto de los postigos como de las ilusiones, así que estoy tranquila. En la barra ahora quedan menos vasos y la botella de ese licor de mandarina que me trajiste de Escocia, está por terminarse. Ya sabés que siempre voy a guardar un resto, por mas ganas que tenga de tomarlo, por la simple razón de no ver ese lugar vacío. Volví a ordenar los libros de la biblioteca del pasillo y sigo sin encontrar el de tapa dura verde que compramos juntos en la feria de San Telmo. No busqué demasiado porque eso implicaría que pueda llegar a aparecer y perdería el deseo de la búsqueda. Por la tarde tengo pensado sentarme frente a la chimenea y cantar un par de canciones con la guitarra. Tal vez lo grabe y en vez de una carta te mande una encomienda. Sí. Va a ir el saco azul, que sigue colgado en el perchero de la entrada.
Pd: A tu saco azul le tejí dos bolsillos nuevos.

Cariños, Tiny.

jueves, 3 de agosto de 2017

CARTA DE TINY-7 " LAS ESTAMPILLAS Y EL GATO"

..." me gusta más llevar las cartas al buzón. Ese momento en el que el sobre cae ahí, en su interior, es incomparable. En realidad, no se si te conté, la magia empieza en el momento en el que guardo las hojas(siempre son dos)en el sobre. No es exactamente cuando escribo tu nombre, sino cuando pego las estampillas en el lado derecho, arriba. Yo tenía un álbum en el que coleccionaba estampillas. Me encantaba conseguir nuevas piezas. Ahora que ya me quedan pocas, las cuido como si fueran un tesoro¿ viste que ya no se usan las estampillas? Todo ha cambiado tanto que me asusta pensar en lo que pasará cuando pegue la última en algún sobre. Es que fueron muchos años los que han pasado y es lógico que ya no sepa dónde habrán quedado esa cantidad de estampillas que tenía. La memoria solo recuerda algunos espacios del pasado. No es que haya quedado presa del tiempo que pasó. No es eso. Es que me gustaría saber qué fue de mi álbum. Tal vez vos puedas traerme algunas, de tus viajes ¿cuándo te vas a Barcelona? una tarde recorriendo lugares para conseguirlas, puede llegar a ser diferente. Es importante que lo pienses. Mis cartas tendrían un corto tiempo de vida, si no me las trajeras. Creo que son tan necesarias las estampillas, como las palabras que viven en el sobre. Por otra parte, te cuento que la carta que recibí el otro día se llevó mis ilusiones por completo. Por eso fue una buena decisión demorar en abrirla. Las horas que pasé con el sobre cerrado, fueron maravillosas. Mi imaginación hizo viajes increibles, en esa demora. La tan ansiada carta...¡ qué poco que dura la ilusión! y pensar que solo dependía de mi ansiedad, aunque pensándolo bién, estoy contenta de no haberla dejado cerrada. Porque ya sabés como soy, me encanta soñar pero en algún momento necesito ver la realidad y la realidad fue que mi gato no se fue solo; por decisión propia. Al gato se lo llevaron. El gato tenía una marca que era inconfundible. Ahí estaba mi dirección, en esa chapita que yo me negaba a colgarle en el cuello. No puedo seguir; será mejor que te mande esta carta, así, imprecisa, y que mañana me dedique a contarte con detalles, qué fue lo que pasó con mi gato.
Pd: No te olvides de pensar en las estampillas.

Cariños, tiny.

martes, 1 de agosto de 2017

EL ESPACIO DE LAS CARTAS EN EL BLOG


CARTA  6 "EL CARTERO Y LA BICICLETA"


..."Fue muy graciosa la situación. Yo estaba sentada en el fondo del jardín( ese lugar en el que nadie puede verme, porque hay que pasar por varias plantas que están muy crecidas y no podo, a propósito). Sentí que aplaudían, cerca de la tranquera. Me asomé, corriendo unas lianas de la bignoñia y no vi a nadie. Es que el jazmín ha trepado por las maderas y ya casi no deja ver si hay alguien ahí. Volví a retomar mi lectura, esa que no logro terminar, por las interrupciones constantes y de golpe escuché otra vez los aplausos. Me paré y vi las ruedas de una bicicleta, sin girar; detenidas. Al desenganchar la cadena para poder saber quién aplaudía insistentemente, lo miré, todo vestido de azul. Tenía una gorra y un escudo brillaba en su campera ¿ podés creer que todavía el correo llegue a mi casa en bicicleta? fue tan grande la emoción que cuando quise tomar la carta que el mensajero tenía en la mano, pisé mal y caí sentada entre los restos de las hojas que había quemado ayer. Me levanté tan rápido como pude, le firmé la planilla y leí mi nombre en letras azules, en el sobre blanco. No quise saber quién era el remitente. Creo que no le dije ni siquiera gracias, no sé qué fue lo que me trastornó tanto. Ya sé. Una maleducada, eso fui. Es que la emoción fue tan grande, al ver al cartero con un sobre para mi, que olvidé todos los saludos y las gracias, que me enseñaron hace tanto tiempo. Voy a prepararme un té bien caliente y voy a sentarme frente a la chimenea ¿Si voy a abrir el sobre? ya veré . Quizá te cuente mañana, o pasado mañana, o tal vez lo guarde en el baúl azul (en el que guardo el cuaderno donde en una hoja, aún vive tu letra)"

Cariños Tiny.