Momentos. Instantes fugaces. Las agujas del reloj, siguen su viaje. No se detienen. Son minutos que suceden a otros. Dejan huellas. Señalan y marcan. Ratitos. Pequeños e insolentes. Logran que las emociones sacudan las horas posteriores. En un ratito escuché emocionada el llanto de un bebé que nacía. En otro ratito, a mi lado, el corazón de papá dejaba de latir. Ratos cortos que develan el misterio del tiempo. Ratitos absolutos. Infinidad de sensaciones, tan solo en un ratito.
No hay comentarios:
Publicar un comentario